LA VIDA AL CENTRO: SOBERANÍA ALIMENTARIA DESDE LA EXPERIENCIA FEMINISTA CAMPESINA DE VIDA AC, MÉXICO

Resumo

El sistema agrícola y alimentario hegemónico se mostró incapaz de garantizar la
seguridad alimentaria de las comunidades y son las mujeres las que más sufren, porque a pesar
de que producen entre 60 y 80% de los alimentos en los países del Sur global, son las que más
padecen hambre (VIVAS, 2012). Como alternativa, desde 1996 el movimiento de campesinas y
campesinos avanza en la construcción de la soberanía alimentaria, donde las mujeres juegan un
papel importante en la incorporación de perspectivas de género, igualdad y posicionamientos
feministas de ruptura con la lógica patriarcal (LA VÍA CAMPESINA, 1996; 2015; 2017).
Según Analía Zamorano (2021), en la resistencia por la soberanía alimentaria y en la
identificación de las nuevas formas de sentipensares, la visibilización de la mujer como actora
social es clave. Adicionalmente, varios estudios han demostrado que para resolver problemas
complejos, como los vinculados a la soberanía alimentaria, se necesita crear conocimientos y
acciones que involucren a diversos actores y actoras. Particularmente el trabajo de Scott Page (2008) muestra que los grupos formados por personas diversas son más efectivos que los
equipos de expertos trabajando con sus pares. Esto es algo que muchas veces se enfatiza en el
discurso agroecológico, pero pocas veces se concreta. Con esto en mente, aquí colaboramos en
la escritura de este artículo siete mujeres campesinas cafetaleras de la organización Vinculación
y Desarrollo Agroecológico en Café (VIDA AC) y cuatro mujeres académicas. Algunas de
nosotras participamos en el mundo rural y el académico, y algunas nos posicionamos solo en
uno de estos dos mundos.
Las autoras somos mujeres feministas, que trabajamos en distintos campos, pero
compartimos aspiraciones y esfuerzos en la promoción de la agroecología con énfasis en la
soberanía alimentaria. En este ensayo enlazamos nuestras voces, buscando evitar la
colonización de discursos para expresar la diversidad epistémica que encarnamos. La
construcción de reflexiones comunes desde nuestras diferencias demuestra que otra academia -
más dialógica, plural y comprometida con el cambio social - es posible.
En esta experiencia de co-escritura, a invitación y guía de la primera autora, las mujeres
de VIDA AC compartimos nuestras maneras de comprender y vivir la soberanía alimentaria, la
salud integral y la alimentación sana, particularmente a partir de los quelites.10 Asumimos una
perspectiva feminista, buscando aportar a la noción de soberanía alimentaria y mostrar cómo las
mujeres campesinas organizadas en VIDA AC somos agentes de cambio social. Las mujeres
académicas integramos la noción de soberanía alimentaria propuesta por La Vía Campesina
para reflexionar sobre los procesos de las mujeres de VIDA AC, y en la sección final, todas las
autoras reflexionamos sobre esta experiencia de escritura colectiva y los principios que
subyacen la visión y vivencia feminista de la soberanía alimentaria según VIDAAC.